La República Democrática del Congo (RPD), situado en África Central, es el segundo país más grande del continente por extensión geográfica. Con 89 millones de habitantes es un país con una agitada historia y en el que en muchas de sus zonas se dan las características perfectas para la plantación de café de especialidad. Hoy explicaremos la historia del Congo en relación a la caficultura y las características de los granos que allí se cultivan.
Desarrollo de la caficultura congolesa
El café y su cultivo es introducido desde Liberia por los colonos belgas en 1881 . Unos años después, en 1898, se descubre una nueva variedad de café canephora que, debido a sus propiedades resistentes denominan como «robusta». Es en este momento en el que comienzan a crearse grandes plantaciones férreamente gestionadas. Con el gobierno en la gestión, estas grandes plantaciones disponían de recursos ilimitados y amplia financiación. Se llegaron a construir hasta 26 estaciones de investigación y contaban con más de 300 profesionales trabajando para el Institut National pour l’Etude Agronomique du Congo Belge (el Instituto Nacional de Estudios Agrícolas del Congo Belga).
En 1960, el país se independiza de Bélgica y comienza una etapa de caída del sector. Durante los años 70 y 80 la caficultura congolesa trata de sostenerse gracias a ayudas y estrategias fomentadas por el gobierno como reducir los aranceles para las exportaciones. Sucede también un fenómeno que hemos ido viendo en otros orígenes cafeteros en los que la colonización fue el factor que introdujo la planta del cafeto en el territorio. La población autóctona da la espalda a la caficultura pues la consideran una actividad de las colonias que en el pasado impusieron su desarrollo. A pesar de esto el cultivo de café se mantiene estable.
A partir de 1990 comienza una etapa muy convulsa tanto para el panorama político del Congo como para la caficultura. Las dos Guerras del Congo (1996 a 2003) azotan el país y el sector de manera despiadada. Además hemos de sumar la aparición de una enfermedad que se extiende por los cultivos y provoca que los cafetos se marchiten.
En la actualidad, el panorama político del Congo sigue siendo muy convulso. Los conflictos sociales y políticos que suceden en la actualidad no permiten que la caficultura se desarrolle totalmente. Tanto gobierno como organizaciones no gubernamentales buscan en la caficultura un motor económico y de bienestar para el país.
Características del café
En el Congo se producen en torno a 375.000 sacos de 60kg (cifras de 2020). En este país se produce principalmente café robusta pero también podemos encontrar regiones en las que se cultiva arábica puesto que cuenta con las características naturales adecuadas para su cultivo.
Los cafés del Congo, por lo general, presentan un cuerpo medio, con notas intensas a bayas, cítricos y frutas de hueso.
Principales regiones cafeteras
Gran Norte: Es una de las regiones con mayor producción de los territorios cafeteros. Los granos crecen entre 1.200 y 2.200 metros sobre el nivel del mar por lo que se encuentran tanto cultivos de robusta como de arábica. Los cafés de esta zona se caracterizan por tener un cuerpo medio, con una cítrica y matices a notas tropicales.
Pequeño Norte: El café se cultiva a una altitud entre 1.400 y 1.800 metros sobre el nivel del mar en un lecho volcánico arcilloso. El cuerpo de los cafés de esta zona no es tan pronunciado como en otras aunque también podamos encontrar matices a cítricos y otras frutas en sus tazas.
Bord du Lac: Esta región hace frontera con Ruanda situada en plena falla albertina. Se cultiva entre 1450 y 1800 metros sobre el nivel del mar. En sus tazas se pueden esperar notas de manzana, jazmín, chocolate, flores de café, naranja y mora.
Ituri: Una región con una orografía muy escarpada, limita con Uganda, sus suelos son fértiles y arcillosos lo que lo hacen perfecto para cultivar café de especialidad. Los granos se cultivan entre 1.600 y 1.900 metros sobre el nivel del mar.
Ruzizi: Zona fronteriza con Ruanda y Burundi. En ella se cultiva principalmente la variedad Bourbon, entre los 1.400 y los 2.400 metros sobre el nivel del mar. Las tazas obtenidas de esta región también cuentan con notas cítricas y de frutas tropicales así como con cuerpo medio, estas son las principales características de los cafés congoleses. Además en los cafés de esta región se pueden apreciar matices a frutas como limón y melón.