Si eres nuevo en el mundo del café de especialidad y estás descubriendo estos pequeños templos del café de calidad este artículo es para ti. Y es que cada día surgen nuevas cafeterías de especialidad pero quizá no todas sigan las lineas de calidad que caracterizan al café de calidad. En el artículo de hoy te dejamos algunas situaciones a evitar según nuestra experiencia, esperamos que os resulten útiles.

1. Desconocimiento de los granos en la tolva

Entrar a una cafetería de especialidad puede ser una ocasión idónea para aprender sobre los granos que vas a probar. Por este motivo, el barista o el personal con quien trates deben conocer los granos que tienen en la tolva.

En alguna ocasión hemos preguntado por el origen del café que habíamos pedido y ver que el barista no conocía su procedencia ni proceso causó una mala sensación en nosotros.

Los baristas, a menudo, son la puerta de entrada de mucha gente al mundo del café de especialidad. Por lo que debería ser casi obligatorio que informasen debidamente a su clientela en cuestiones de trazabilidad.

2. Cafés sin fecha de tueste

La frescura del café es esencial para una buena taza de café. Si la cafetería no proporciona una fecha de tueste claramente visible, puede ser una señal de que el café no es fresco o que ha sido almacenado durante demasiado tiempo.

En ocasiones, puede que esta información no esté visible al cliente, si es así no dudes en preguntar a los trabajadores.

3. Mal servicio al cliente

El servicio al cliente es importante en cualquier negocio, y las cafeterías de especialidad no son una excepción. Si el personal de la cafetería no presta atención a las necesidades del cliente, no les brinda un buen servicio y no les hace sentir valorados, puede ser una señal de que la cafetería no se preocupa lo suficiente por el cliente o por su negocio en general.

A pesar de esto, siempre aconsejamos ser comprensivos y pacientes en el trato al personal de cualquier establecimiento del sector servicios ya que a menudo cuentan con altos niveles de trabajo.

4.  Equipamiento y espacio en malas condiciones

Para preparar un espresso, por ejemplo, se deben cuidar ciertos aspectos para que el espacio de trabajo sea el óptimo. No siempre contar con la mejor maquinaria es un exponente de la calidad de la bebida.

Es cierto que en el planteamiento de apertura de una cafetería de especialidad, la inversión en equipamiento siempre será una buena iniciativa a tomar. Muchas veces, la experiencia del barista puede mejorar la calidad de las bebidas de una manera sorprendente, lo que conocemos como el «know how». Debido a esto, contar con equipos de alta gama no siempre es un exponente de calidad.

Además del equipo, la gestión de la higiene en el espacio de trabajo es muy importante y es un requisito indispensable de un buen barista.

5. Precio excesivo

El precio del café de especialidad debe ser más alto que el precio del café comercial, esto no se puede discutir. Y es que en el café de especialidad intervienen más personas y procesos que además de sumar valor económico también añaden calidad.

Sin embargo, si la cafetería cobra precios excesivamente altos por su café, puede ser una señal de que están tratando de aprovecharse de los consumidores o de que no están ofreciendo una buena relación calidad-precio.

Si detectas algunas de estas señales cuando visitas una cafetería te recomendamos que se lo hagas saber al personal de forma adecuada y amable. Estamos seguros que el personal de una cafetería de especialidad trabaja a diario para ofrecer el mejor servicio posible. Esperamos que el artículo de hoy te sirva de ayuda para disfrutar de tu café en tu lugar preferido.