Con un mercado que cada día da pasos para ser más sofisticado, la aparición de nuevos métodos de preparación de café es siempre una grata noticia. Este método recibe el nombre de MUPECO y a continuación os explicaremos un poco de su historia y la de su creador.
La historia de Rolando Ruiz
Rolando Ruiz Loayza es un ingeniero eléctrico peruano que entró en contacto con el mundo del café gracias a uno de sus tantos viajes por el país andino. En Chanchamayo, en 2012, conoció a una familia dedicada al cultivo de café y quedó asombrado por los métodos de tostado artesanal que allí empleaban. Rolando comenzó a involucrarse cada vez más con esa familia y su realidad así como la del resto de familias de la zona y decidió dar su apoyo desarrollando sus propias máquinas de tueste. Es así como en los siguientes años Rolando se dedicaría a crear máquinas y adiestrar a las familias en el tostado de café a través de sus numerosas visitas a Chanchamayo.
En 2014, durante una de estas visitas se dio cuenta que tenía café tostado con él pero nada para poder extraer esos granos. Ante esta necesidad, la creatividad de Rolando se puso en marcha y dio con una cáscara de naranja seca a la que le realizó un agujero en medio que funcionaría a modo de filtro. Así es como nacería la idea de la cafetera que años después vería la luz.
MUPECO
En 2018 con muchas de sus máquinas ya creadas Rolando se hizo tostador y tuvo la idea de construir el primer Museo del Café Peruano, en inglés, Museum of Peruvian Coffee (MUPECO). Tras una serie de circunstancias tuvo que interrumpir su sueño, una idea que todavía sigue en pie. Gracias a amigos apasionados cafeteros y anticuarios Rolando cada día consigue ampliar su colección de elementos de gran valor histórico y estrechamente relacionados con el café de todas las partes del mundo.
Cafetera marroquí (Siglo XIX)
¿Cómo funciona la cafetera?
Antes de explicar su funcionamiento y prestaciones, es conveniente decir que la MUPECO supone la primera cafetera 100% peruana. Está fabricada en arcilla por alfareros peruanos de la ciudad de Cusco. Un producto sostenible y de fabricación total peruana. La morfología de este objeto es similar a la de una bala sin su cartucho.
En palabras del propio Rolando: «La cafetera MUPECO es una cafetera muy versátil, se puede hacer un café tipo gota a gota o tipo americano, dependiendo de la molienda, el tiempo y la extracción que se le puede dar al café. Yo no le pongo mucho protocolo, tener una cafetera MUPECO es experimentar el arte que tiene cada persona. Este es un juguete de la vida.»
Rolando desea crecer junto a los caficultores peruanos y sigue ofreciendo su ayuda para poder mejorar su situación y economía. Conoce las debilidades del caficultor de su país y pretende ofrecer formación y equipamiento para hacer de los granos peruanos los mejores posibles y que los caficultores obtengan una remuneración justa por su trabajo. Otra de sus grandes ambiciones es la creación del Museo del Café Peruano y tenemos claro que lo logrará.
Por el momento esta cafetera no se puede comprar de forma online, se encuentran a la venta en cafeterías y negocios de las ciudades de Lima, Tacna y Cuzco.